Proceso de fabricación industrial del fleje de acero inoxidable



En el siguiente articulo vamos a comentar los diferentes procesos mecánicos necesarios hasta alcanzar el producto final que en este caso se trata del fleje de acero inoxidable cortado a medida. El articulo a continuación ha bebido de diferentes fuentes, entre las que www.aceroinoxidable.com y www.es.wikipedia.org/wiki/Acero_inoxidable

Un fleje es simplemente una cinta de metal, de un ancho determinado y longitud variable. Para alcanzar el producto final, el fleje acero inoxidable, se parte de una bobina de inoxidable, que se coloca en una máquina flejadora. Esta máquina a medida que va desenrollando el material lo va cortando longitudinalmente según el grosor que queramos obtener, de manera que por ejemplo de una bobina de 1 metro de ancho podríamos sacar 10 flejes de 10cms de ancho, 20 flejes de 5cms de ancho,…. La flejadora también puede cortar transversalmente los flejes, de manera que al final de proceso tenemos la pletina acero inox con las medidas tanto de longitud como de ancho requeridas. Las tolererancias de corte que se pueden obtener con flejadoras de última generación son inferiores a 0.01mm, mientras que la tolerancia de espesor se mantiene la misma de la bobina de acero inoxidable, pues durante el proceso de flejado no se modifica el espesor del fleje.

En función del uso que vamos a darle a la banda de inoxidable, utilizaremos un acero u otro; para la mayoría de los usos industriales (abrazaderas u otros elementos utilizados para instalaciones industriales y plantas de procesos o transporte) se utiliza el acero inox austenítico, pues son muy resistentes a la corrosión y tienen una gran ductilidad. Se trata de los aceros 301-304(L), 316(L) y 321. Los aceros austeníticos tienen una conductividad térmica baja, por lo que son los utilizados en instalaciones de calorifugado. Para la fabricación de piezas de precisión como pueden ser partes de motores, turbinas, bombas, válvulas u otros desarrollos de ingeniería, se utilizan aceros martensíticos, pues además de su gran resistencia a la corrosión son muy resistentes al desgaste. Los grados más frecuentes son el 410, 420 y 440.